Las estaciones ya trabajan con horario reducido y atienden solo hasta las 21:00 por el toque de queda.
Como una situación insostenible califican los distribuidores de combustibles las circunstancias de las gasolineras en Guayas, Esmeraldas y Santo Domingo de los Tsáchilas, donde hasta el momento se cuentan ocho atentados con artefactos explosivos.
Las estaciones de servicios junto a las Unidades de Policía Comunitaria (UPC) han sido los blancos predilectos de los delincuentes desde la madrugada del 31 de octubre pasado.
Iván Casanova, vicepresidente de la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados del Petróleo del Ecuador (CAMDDEPE), insiste al Gobierno en que militarice las gasolineras de las tres provincias afectadas, pedido que expuso desde el 1 de noviembre pasado, pero lamentó que hasta la fecha no ha tenido respuesta y los ataques continúan en las gasolineras.
“Unas gasolineras ya han venido cerrando (por los atentados)”, sostuvo Casanova, sin detallar cuántas han dejado de atender, no obstante advirtió que estos cierres agravan más la situación que las estaciones ya venían presentando por los bajos márgenes de utilidad. Añadió que además las estaciones han reducido su horario de atención por el toque de queda y solo atienden hasta las 21:00
Desesperado el dirigente aseguró que pueden esperar hasta este viernes 4 de noviembre o máximo hasta el sábado una respuesta del Gobierno, pues aseguran que de no lograr la presencia militar en las estaciones deberán forzosamente empezar a cerrarlas para precautelar la integridad de los clientes.
“Estamos insistiendo al Ministro del Interior que necesitamos militarizar las gasolineras, pero no nos toman en cuenta en esta petición que es muy difícil. Le hemos dicho que estaremos obligados a cerrar por el asunto de poder proteger a los usuarios”, sostuvo Casanova.
En tanto, Leonardo Alvarado, presidente de la Asociación de Propietarios de Gasolineras de la provincia del Guayas, confirmó que de no conseguir que el Gobierno les de garantías para operar continuarán cerrados de 22:00 a 05:00.
“Otra propuesta que también se analiza es atender solamente en jornada laboral, ya que nuestro centro de trabajo son un blanco absurdo de la delincuencia tratando de imponer miedo a la población y no estamos dispuestos a seguir poniendo en riesgo nuestro trabajadores, los usuarios y nuestras instalaciones que con mucho esfuerzo las mantenemos”, manifestó Alvarado.